Todos hemos experimentado la incómoda y, en ocasiones, arriesgada situación de tener las gafas empañadas. Con los cambios bruscos de temperatura o con la respiración, la humedad que sale de nuestro cuerpo se retiene en las lentes y por eso nuestras gafas se empañan

Esta situación se agrava más con el uso de la mascarilla, ya que dirige el aire caliente hacia nuestros ojos y se condensa en nuestras lentes, sobre todo en invierno, al estar los cristales más fríos. En este artículo veremos los beneficios de emplear antivaho para los cristales.

antivaho para cristales en albacete

¿CÓMO SE PRODUCE LA CONDENSACIÓN EN LOS CRISTALES?

La condensación se produce cuando el aire caliente y húmedo entra en contacto con una superficie fría y lisa, como la lente de las gafas. Ese contacto hace que el aire caliente baje de temperatura y la humedad se convierta en microgotas de agua, que provocan que las gafas se empañen.

Este fenómeno también lo experimentamos en situaciones tan cotidianas como abrir el lavavajillas o el horno, destapar una olla, comer algo muy caliente, pasar de un ambiente frío a uno más caliente o cuando sudamos haciendo deporte. Las gafas se empañan más si están muy pegadas al rostro y, por el contrario, se empañarán menos si nos quedan más separadas, al haber más distancia entre mascarilla y cara.

Es por esto que las gafas de pasta son las que más tienden a empañarse, ya que se adaptan al contorno de tu cara y el aire que expulsas queda atrapado. Por este motivo tienden a empañarse más, sobre todo la zona más cercana a la nariz. En cambio, las gafas con una montura metálica y con un puente ajustable permite que circule mejor el aire.

PRODUCTOS ANTIVAHO PARA CRISTALES

Una solución a este molesto problema es el uso de productos con propiedades superhidrofóbicas, capaces de repeler cualquier líquido. Estos productos, también conocidos como antivaho, hacen que las gotas de agua no se peguen a su superficie, sino que se deslicen. Los agentes antivaho son sustancias químicas que impiden la condensación del agua en forma de pequeñas gotas sobre determinadas superficies. Estos tratamientos trabajan minimizando la tensión superficial, resultando una película que esparce el agua, lo que facilita su evaporación, evitando la formación de gotas y reduciendo así la capacidad de mojar del líquido condensado. Suelen consistir en la aplicación de una película surfactante, o en la creación de una superficie hidrofílica.

Los avances en el campo de la óptica también han permitido crear lentes con tratamientos de autolimpieza que repelen el agua, el polvo y la grasa o directamente con tratamiento antivaho. La tecnología ANTI-FOG empleada en algunas lentes de alta gama hace que la capa antivaho aplane el agua formada por el vaho y la transforme en una capa fina y transparente. En Ópticas Pérez Setién tenemos a disponibilidad del cliente estos tipos de lentes, para solucionar el problema de raíz.

Otra opción es utilizar productos específicos antivaho para cristales, los cuales, podemos encontrar en diferentes versiones tales como spray, gel o toallitas. 

spray antivaho para cristales en albacete

ANTIVAHO PARA CRISTALES CASERO

En el caso de no tener opción de comprar un producto específico antivaho, también puede recurrirse a algún remedio casero. No son tan eficaces como los productos comerciales comentados, pero pueden servir como apaño para mejorar un poco la situación:

Media patata: frotar por el cristal (desde el interior) y quitar después los restos con un trapo húmedo, es uno de los mejores métodos para que el agua resbale. Esto se debe a que el almidón que contiene el tubérculo repele la humedad. Pero debemos tener en cuenta que si no quitas bien los restos, se formará un color blanco muy molesto para tu visión.

Crema de afeitar: Parece raro, pero funciona igual de bien que cualquier líquido antivaho del mercado. Basta con aplicar la espuma de afeitar y frotarla bien con un trapo hasta que desaparezcan los restos; de esta manera el cristal estará preparado para pelear contra la condensación.

Champú: Y si es para niños, mejor. Se trata de un método que utilizan los buceadores para evitar que se les empañen las gafas en plena inmersión. La aplicación es similar a la de la crema de afeitar, frotando bien sin usar nada de agua para no dejar reflejos o chorretones.

Una pastilla de jabón: El jabón en barra o en pastilla que se usaba para lavar la ropa antiguamente también desempaña el cristal. Hay que rayarlo un poco en un cubo con agua y aplicarlo con un trapo bien escurrido. Después se pasa un trapo seco hasta dejar la lente bien transparente.

Pasta de dientes: Se aplica bien la pasta haciendo una película muy delgada y después se quitan los restos con un trapo húmedo. Al final se pasa un trapo seco para dejar la lente impecable.

Lavavajillas: Con él se embadurna el cristal, pero no se moja con agua. Después, con un trapo de microfibra se limpia hasta que desaparezcan los restos de jabón para que no queden marcas.

Líquido de enjuague bucal: Menos eficaz, pero al llevar alcohol algo ayuda a desempañar.

Cebolla y aguacate: Siguen, en parte, los pasos de la patata, pero su efecto es significativamente menor. Y teniendo en cuenta que la cebolla huele y hacer llorar y que el aguacate es muy grasiento, mejor optar por la patata.

Líquido antivaho casero: Una buena receta es mezclar dos partes de agua y una de vinagre blanco. Después es recomendable aplicarlo a los vidrios con un papel de periódico.

Calentar las lentes con el aliento antes de ponértelas: Vamos expulsando aire caliente de la boca y la nariz. Al encontrarse éste con unas lentes con una temperatura más fría, el vapor se condensa y forma el vaho. De modo que si calientas las gafas con tu aliento subirá la temperatura de la lente y se empañará menos.

En las mascarillas sanitarias, hacer un pequeño doblez hacia dentro. Si doblas la parte superior de la mascarilla antes de colocártela contendrá el vaho y no se te empañarán las lentes. Este remedio sólo sirve para las mascarillas sanitarias y que no tienen una parte metálica en el puente de la nariz.

Como podemos ver, soluciones hay para todos los gustos.

Hay otra solución muy efectiva, que es combinar el uso de gafas graduadas con el de lentes de contacto, ya que las lentes de contacto eliminan todo riesgo de que se produzca vaho y permiten una visión nítida, de amplio campo visual y muy cómoda durante la jornada, tanto a la hora de trabajar como de hacer deporte.

Pero en caso de duda, lo más sencillo y seguro es acudir al óptico-optometrista para explicarle nuestras necesidades y dejarse asesorar, dado que él sabrá cuál es el sistema más eficaz para nuestros requerimientos.

¡Puedes ponerte en contacto con nosotros y te asesoraremos con mucho gusto!